En el verano, ante las altas temperaturas típicas de esta estación, nos hemos acostumbrado a salir a las calles con protector solar. De esa manera, protegemos nuestra piel de la radiación. No obstante, cuando llega el invierno, dejamos de lado esta, y muchas otras prácticas de protección a la piel, por lo que estamos vulnerables a la radiación solar, la cual, a pesar de los días nublados, atraviesa las nubes y llega hasta nuestra piel causando lesiones que pueden derivar en cáncer de piel.
Según una publicación de ESSALUD, es importante que la piel se proteja tanto en verano, como en invierno, y el resto de las estaciones del año. Esto con el objetivo de que no se llegue a desarrollar, por falta de prevención, cáncer de piel, como el melanoma. Es importante tener este consejo en cuenta, en especial, cuando se sabe que el cáncer de piel es el tercer tipo de cáncer con mayor incidencia en el Perú.
Entonces ¿por qué proteger la piel del sol, incluso en invierno?
Es importante porque la radiación solar no deja de estar presente, fuera de la temporada de verano. En ese sentido, no se debe bajar la guardia ante los cuidados para prevenir el desarrollo de diferentes tipos de cáncer de piel.
¿Cómo prevenir el cáncer de piel en invierno?
Debido a la necesidad de que la piel esté protegida, los 365 días del año, el uso de bloqueadores o cremas fotoprotectoras es necesario. La recomendación de los especialistas es que estas cremas se apliquen cada tres horas, incluso cuando se permanecerá todo el tiempo en interiores. Lo ideal es que los bloqueadores sean de amplio espectro (30 FPS como mínimo)
Otros consejos, para prevenir el cáncer de piel en invierno son:
- Evitar exponerse directamente a la radiación solar, en el horario en el que esta sea más intensa, generalmente entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde (Clínica Mayo, s.f.).
- Tener una buena alimentación que ayude a prevenir el cáncer de piel. Los especialistas recomiendan aquellas frutas y verduras que tengan pigmentación anaranjada, ya que ayudan a la protección del tejido dérmico.
- Utilizar prendas que cubran brazos y piernas, de preferencia pegadas y oscuras. Así mismo, utilizas accesorios como lentes con protección UV y sombreros de ala ancha, para reducir la exposición directa al sol.
- No utilizar cabinas de bronceado.
Así mismo, es importante que podamos realizarnos auto exámenes periódicos, para detectar posibles anomalías en la piel, las cuales también pueden surgir en el invierno, por ejemplo:
- Cambios en la forma, color o textura de lunares.
- Aparición de lunares o manchas en la piel.
- Surgimiento de protuberancias, entre otros.
En IPOR contamos con el tratamiento para combatir el cáncer de piel y otras patologías. Contacte con nuestros especialistas para conocer más del tratamiento para pacientes oncológicos, y si aplica para usted según su diagnóstico.